Estos días hemos estado de excursión en Burgohondo con las niñas. ¡Y nos ha encantado!
Este pueblo del Valle del Alberche de la provincia de Ávila puede presumir de su precioso entorno natural, marcado por la presencia del río Alberche.
Desde allí comenzó nuestra ruta, conocida como ‘Los Bonales’. Para ser más exactos, arrancamos desde Puente Nueva.
Esta área recreativa y de baño, ubicada a unos dos kilómetros de Burgohondo, es una de las zonas preferidas por vecinos y turistas para disfrutar del río, sobre todo en verano. Y la verdad es que no nos extraña nada: es un espacio súper bonito y en los meses más calurosos tiene que apetecer un montón refrescarse en el agua. Así que, tendremos que volver más adelante.
UNA EXCURSIÓN CIRCULAR
Pero ahora, en pleno otoño, de lo que se trataba es de disfrutar de una caminata por una ruta circular, marcada como la PRC AV-13.
Nuestros pasos comenzaron en la calle Camino de Galapagar. Veréis indicado el nombre. Y empezamos a caminar dejando el río Alberche a nuestra izquierda.
En esta primera parte del recorrido la marcha está protagonizada por huertos y viviendas. El camino es muy cómodo, así que se puede realizar sin problema con niños pequeños.
En el mismo, por cierto, os iréis encontrando, además de con la señalización propia de la ruta, con las señales de Asotur-Alberche Pinares.
LIGERO ASCENSO
Esta primera parte del recorrido se hace en un pequeño ascenso. Nada agotador y muy llevadero.
Siguiendo siempre el camino, resulta, además, imposible perderse. Y es que, ya sea para bien o para mal, esta ruta no permite salirse del sendero marcado, que se encuentra en su inmensa mayoría rodeado de campos de labor.
Aunque eso, sin duda, es también parte de su encanto. A nosotros, al menos, nos gustó mucho poder contemplar los huertos o los viñedos, y hablar con las niñas sobre las tareas del campo.
Y a ellas les dio una inmensa alegría encontrarnos con varios burritos en el paseo. Los animales, muy atentos, no dudaron a la hora de acercarse a saludarnos. Y eso, como os podréis imaginar, siempre es un plus cuando se sale al campo con niños pequeños.
ACEQUIAS EN EL CAMINO
La abundancia de huertas, viñedos y campos de labor en el recorrido regala al caminante, además, algunos tramos en los que aparecen acequias con agua corriendo.
El sonido del agua a los pies de la Sierra de Gredos, siempre presente en el camino y regalando unas vistas impresionantes, es otra de las constantes en esta excursión por Burgohondo.
GRAN VARIEDAD DE ESPECIES
Nogales, pinos, robles, zarzamoras, vegetación de ribera…. El camino es todo un surtido de especies vegetales, que regalan estampas preciosas para los caminantes.
Estamos convenidos de que lo vais a disfrutar. Veréis, además, que todos los cruces están muy bien selalizados, y que es imposible perderse.
LLEGADA AL BARRIO DE LOS BONALES
Uno de esos cruces es el que os llevará al barrio de Los Bonales, el que da nombre a esta excursión en Burgohondo.
De esta zona, lo que sin duda más nos gustó fue encontrar una antigua construcción para guardar el ganado. Las niñas, siempre ocurrentes, vieron en la misma un precioso Portal de Belén.
EL REGRESO
El regreso al comienzo del camino, en Puente Nueva, es también muy cómodo. Y se hace casi en su totalidad de bajada.
DATOS DE LA RUTA
Completamos esta excursión en Burgohondo, la ruta de Los Bonales, en una hora y tres cuartos, apenas sin paradas.
Fue el tiempo que necesitamos para completar los 5,8 kilómetros de recorrido. Un recorrido que, como os decíamos, no es muy exigente: apenas tiene un desnivel de 121 metros.
En este enlace podéis consultar nuestra excursión en Burgohondo en Wikiloc.
CÓMO LLEGAR A BURGOHONDO
Para llegar a Burgohondo, ya lo hagáis desde Ávila o desde Madrid, debéis coger las AV-900.
Al llegar al pueblo cogeréis la AV-901, que cruza por encima del río Alberche. Y en todo momento tenéis que seguir las señales que indican hacia Puente Nueva.
MÁS EXCURSIONES EN EL VALLE DEL ALBERCHE
Aprovechamos para recordaros otras excursiones chulas por la zona del Valle del Alberche.
Tenéis, por ejemplo, la visita a los Toros de Guisando y el Monasterio de los Jerónimos; la Senda de la La Lancha de las Víboras, en Iruelas; o el Castañar de El Tiemblo.